París, 3 de junio de 2025, 15:57 +07 – La ceremonia de entrega de premios de Roland-Garros 2025, bajo las icónicas luces de la pista Philippe-Chatrier, debía celebrar la prestigiosa carrera de Rafael Nadal con toda la pompa que merece. Pero la leyenda española transformó la velada en un espectáculo mundial al revelar de forma impactante el nombre de su segundo hijo: «Nuestro segundo hijo se llamará como mi rival más formidable…». Esta frase inconclusa, que quedó en el aire, desató inmediatamente una gran indignación y dejó al mundo del tenis —y a millones de televidentes— conmocionados y fascinados.
Nadal, ahora de 39 años, acababa de recibir el Premio a la Trayectoria por sus inigualables 14 títulos de Roland Garros cuando habló. El público, que esperaba un discurso de aceptación al uso, no estaba preparado para la sorpresa que siguió. Rodeando a su esposa, Xisca Perelló, y a su hijo, Rafa Jr., Nadal hizo una pausa, con los ojos brillantes de emoción. “Este torneo me lo ha dado todo”, comenzó, con voz segura pero cargada de anticipación. “Y mientras nos preparamos para dar la bienvenida a nuestro segundo hijo, hemos decidido algo audaz. Nuestro segundo hijo llevará el nombre de mi rival más formidable…”. Se detuvo en seco, dejando que el suspense creciera, antes de añadir con una sonrisa irónica: “¡Pronto lo descubrirán!”. El estadio estalló en exclamaciones y vítores, mientras que redes sociales como X estallaban en especulaciones.
La ambigüedad de la declaración de Nadal alimentó un frenesí de teorías. Muchos señalaron inmediatamente a Novak Djokovic, su eterno rival, con quien comparte una rivalidad legendaria: 24 títulos de Grand Slam cada uno para 2025. Otros mencionaron a Roger Federer, el tercer pilar del Big Three, cuya elegancia en la cancha contrastaba con la valentía de Nadal. La ausencia de un nombre solo intensificó la conmoción, convirtiendo los premios en un auténtico juego de adivinanzas global. “¿Acaso Rafa le puso a su hijo el nombre de Djokovic? ¡Qué locura!”, escribió un usuario de X. Otro escribió: “¿Nadal honrando a un rival así? ¡La historia del tenis acaba de reescribirse!”.
La vida personal de Nadal siempre ha sido un asunto privado, lo que hace que esta revelación pública sea aún más impactante. Su primer hijo, Rafa Jr., nacido en 2021, lleva su nombre, un guiño a la tradición familiar. La decisión de nombrar a su segundo hijo, que nacerá a finales de este año, con el nombre de un rival demuestra un profundo respeto que trasciende la competencia. “Este niño llevará el espíritu de alguien que me impulsó a ser lo mejor que podía ser”, sugirió Nadal, con palabras cargadas de gratitud. Xisca, de pie a su lado, asintió con la cabeza, y su sonrisa insinuó la decisión compartida.
La comunidad tenística estaba dividida, pero cautivada. Djokovic, presente en la ceremonia, restó importancia a las especulaciones con una risita jocosa: “¡Espero que sea un buen nombre!”. Federer, observando desde la distancia, tuiteó: “¡Rafa, estás lleno de sorpresas!”. Los fans de X debatieron las implicaciones, algunos elogiando la deportividad de Nadal y otros cuestionando su decisión. “Ponerle a un niño el nombre de un rival es un respeto a otro nivel”, comentó un fan. Otro añadió: “¡Imagínense a Novak Nadal; el tenis nunca volverá a ser el mismo!”.
El momento también puso de relieve el legado en evolución de Nadal. En Roland Garros 2025, compitió en lo que muchos consideran su último torneo, con el cuerpo castigado por las lesiones, pero el espíritu intacto. La ceremonia de premiación celebró su dominio en tierra batida, pero el anuncio del nombre de su bebé centró la atención en su crecimiento personal. “La rivalidad me hizo quien soy”, dijo Nadal. “Este nombre es mi forma de honrarla”. Esta revelación inconclusa, intencionada o provocadora, dio lugar a una interminable discusión, con las probabilidades a favor de Djokovic debido a sus enfrentamientos directos, que sumaron un total de 59 partidos, con Nadal ganando 30-29.
Al final de la velada, la atención se centró en la familia de Nadal. Xisca, visiblemente embarazada, saludó al público, mientras Rafa Jr. imitaba el puño en alto de su padre, deleitando a los espectadores. El mundo del tenis estaba en efervescencia, esperando la confirmación del nombre. “Es más que tenis, se trata de legado y amor”, comentó un usuario. En X, la etiqueta #NadalBabyName se viralizó, con fans compartiendo memes y teorías, desde “Novak Jr.” hasta “Rogerita”.
Roland Garros 2025 será recordado no solo por las hazañas de Nadal en la cancha, sino también por este importante hito personal. Su decisión de asociar a su familia con el legado de un rival —ya sea Djokovic, Federer u otro— desafía las rivalidades tradicionales, transformando la competición en celebración. Mientras el mundo espera la revelación completa, las palabras de Nadal resuenan, prometiendo una historia que marcará el tenis de las generaciones venideras.