Jack el Destripador, conocido como uno de los asesinos más notorios y enigmáticos de todos los tiempos, dejó una huella imborrable en la historia del crimen. Este personaje siniestro sembró el terror en el East End de Londres a finales del siglo XIX, y, hasta hoy, su identidad sigue siendo un misterio sin resolver. Casi 150 años después, los asesinatos que cometió continúan fascinando y horrorizando tanto a historiadores como a amantes de lo oculto.
Entre agosto y noviembre de 1888, al menos cinco mujeres fueron brutalmente asesinadas en el distrito de Whitechapel. Las víctimas, todas ellas trabajadoras sexuales, fueron encontradas con signos de mutilaciones espantosas, lo que demostraba un conocimiento anatómico perturbador por parte del asesino. A pesar de los esfuerzos intensivos de la policía londinense y de Scotland Yard, Jack el Destripador nunca fue atrapado, y su caso pasó a formar parte de la leyenda negra del Reino Unido.
En este recorrido por la verdadera historia detrás de Jack el Destripador, exploramos a fondo cada uno de los crímenes, examinamos las condiciones sociales del Londres victoriano y analizamos las fallas en la investigación policial. El ambiente en el East End, marcado por la pobreza extrema, la prostitución y el hacinamiento, proporcionó el escenario perfecto para que un asesino serial operara en la oscuridad.

Uno de los aspectos más inquietantes de este caso es la falta de pruebas concluyentes. Aunque se barajaron numerosos sospechosos —incluyendo médicos, carniceros, artistas e incluso miembros de la realeza—, ninguna teoría ha logrado ser aceptada universalmente. Las cartas enviadas a la policía, supuestamente escritas por el propio asesino, añadieron un aire de terror mediático que solo aumentó el caos y la confusión.
Gracias al auge de la criminología forense moderna, algunos expertos han intentado reabrir el caso utilizando ADN y nuevas tecnologías. Sin embargo, la mayoría de las pruebas originales se han perdido o han sido contaminadas con el tiempo, haciendo que cualquier conclusión sea incierta. Este vacío de respuestas ha dado lugar a una cantidad inmensa de libros, películas, documentales y teorías conspirativas sobre quién pudo haber sido realmente Jack el Destripador.
A pesar del paso del tiempo, el caso de Jack el Destripador sigue siendo uno de los más estudiados y debatidos en la historia del crimen mundial. La brutalidad de sus actos, combinada con el misterio de su identidad, ha convertido este caso en un ícono del horror real.
Hoy más que nunca, su historia sirve como recordatorio de cómo el miedo, la pobreza y la ineficiencia institucional pueden permitir que un monstruo camine entre nosotros sin ser detectado.